Filemon Escobar...

Por: Jhonny Lazo
No sé qué acogida tiene Filemón Escobar en los otros departamentos; pues en Cochabamba este señor no tiene apoyo más allá de su hijo y unos cuantos “raritos” que viven entre chicha y mucha María Juana.
En julio de 1989, en los salones de la ciudad del niño, hicieron un homenaje a Luís Espinal y alguien muy desacertadamente le invitó a Filemón Escobar para que hablara sobre el homenajeado.
En cuanto apareció Filemón el ambiente se puso tenso, con mucho murmullo. Pregunté a alguno que había entre ellos a qué se debía, me dijeron que en el salón se encontraban muchos ex mineros, que eran los más y que no tenían simpatía con el ex dirigente.
Con mucha soberbia y sin rubor alguno el susodicho habló el tiempo que le correspondía y luego se pasó a las preguntas; quien escribe, muy joven aún, le hizo una interpelación sobre la marcha del 85, porque Filemón habló mucho de esa marcha y poco de Luís Espinal. No entiendo hasta hoy que de malo tenía mi pregunta para tan grosera respuesta: pues se paró, y apuntándome con el dedo me increpó “Mocoso, insolente, a tu edad yo andaba por las minas enseñando a los mineros qué es el materialismo histórico y dialéctico”. No me quedó otra que responder “Estoy seguro de eso señor Escobar, pero también tengo la certeza que enseñaba tan mal como cuando era profesor en el Juan XXIII”. Esto provocó la risa de todos los presentes. El ex dirigente me lanzó algunos más insultos y me invitó a salir del salón para arreglar como hombres. No pasó ni un segundo cuando en coro, casi todos los del salón le gritaban ¡ladrón!, ¡vendido, cuanto te pagó Paz Estensoro, para que no lleguemos a La Paz !, ¡porque no devuelvas todos los libros que nos robaste del sindicato!, ¡porque no devuelves el Jeep Lan Rover que robaste del Gerente¡ Esto permitió el retorno de mi ajayu.
En honor a la verdad, no me consta si recibió o no dinero del gobierno del MNR el 85, ni si en verdad robo el Jeep Lan Rover, ni si robo los libros. Pero en la UMSS , no era un secreto para nadie que los libros de la biblioteca que tenía Filemón, llevaba el sello de COMIBOL. No me consta, pues nunca fui amigo de su hijo, por lo tanto nunca fui a su casa.
Finalmente muchos pajaritos cantan en Cochabamba, que Filemón Escobar, Alejo Veliz y Marcial Fabricano. Son asiduos visitantes de la Prefectura de Santa Cruz de la Sierra , que son parte de las orgías de Branco, Costas y sus amigos unionistas.
Dicho de una vez, la tesis que repite hasta el cansancio su medio hermano, don Guillermo Lora, “El proletariado minero la vanguardia de la revolución”, come en la mesa de los “Barones del Oriente”, donde seguro, no debe faltar el Cardenal Terrazas.