15 de mayo de 2020

Los dueños de UNITEL: latifundistas y empresarios

Escribe: Luis Alberto Echazú Alvarado.-

La formación del neolatifundismo en Bolivia, sobre todo en el oriente boliviano, es decir en Santa Cruz, Beni y Pando, tiene en la década del 70 e inicios del 80 del siglo pasado,, durante las dictaduras de Banzer y García Mesa, su apogeo, aunque arranca desde el gobierno de René Barrientos y continúa en el gobierno de Jaime Paz Zamora.

Enormes extensiones de tierra fueron adjudicadas “legalmente”, la mayor parte por favores e influencias políticas, otras fueron obtenidas de modo fraudulento y las menos adquiridas.
Las familias Monasterio Añez y Monasterio Nieme fueron beneficiadas con estas adjudicaciones. Después se comprobó que una buena parte de ellas las obtuvo utilizando documentación fraudulenta.

En el año 1967, con número de expediente 16.782 y sentencia de fecha 28 de septiembre de 1967, Osvaldo Monasterio Añez, apodado “El Pato”, obtuvo la adjudicación de nada menos 46.462 .69 hectáreas en el predio “San Matías”.

En el año 1990, en el gobierno de Jaime Paz Zamora, con número de expediente 55588, del Consejo Nacional de Reforma Agraria, y sentencia de 19 de julio de 1990, Osvaldo Monasterio Nieme, hijo de Osvaldo Monasterio Añez y otros, obtuvo la adjudicación de dos predios, “Monterrey I y II” con una extensión de 10.045 hectáreas,  en la provincia Ángel Sandoval, cantón San Matías. Ambas adjudicaciones totalizan 56.516.54 hectáreas.

Otros predios de la familia Monasterio son “El Ensueño” con 500 hectáreas, adjudicada en el año 1972 y “Curupasí” con 2.482 hectáreas adjudicadas en el año 1991.

Todas las propiedades de los Monasterio Añez y Monasterio Nieme suman 78.340 hectáreas, constituyéndose de esta manera, en una de las familias latifundistas mas grandes de Bolivia.

En el gobierno de Evo Morales en cumplimiento a la ley de reconducción de la ley de Reforma Agraria y por incumplimiento a la función económico social, se revirtieron al estado una parte de las tierras de los Monasterio de esta manera:  2.914 hectáreas en el Cantón El Carmen de la provincia Germán Bush y otras 496 hectáreas, en los predios “La Encrucijada” 2.356 hectáreas y “El Encanto”, 558 hectáreas. El resto de tierras, estaba en proceso de saneamiento.

Las tierras revertidas fueron entregadas a comunidades del pueblo Guarayo.

En el caso de la familia Monasterio, la reversión de tierras sin función economico social, de acuerdo a la Constitución Política del Estado, fue pequeña. En la actualidad esta familia tiene más de 70.000 hectáreas.

Es necesario precisar que esta familia latifundista está compuesta por Osvaldo Monasterio Añez, (fallecido en 2011), su esposa, Lesma Nieme de Monasterio; Fernando Monasterio y los hijos del primero: Osvaldo, Fernando y Ernesto Monasterio Nieme.

Además de poseer acciones en los bancos Ganadero y Santa Cruz; en los medios de comunicación, especialmente en la agresiva y reaccionaria Red Unitel.

En su extensas tierras, los Monasterio siembran soja, y grandes cantidades de ganado ganaderas.

En 1976, Osvaldo Monasterio Añez figuraba como propietario de 10.149 cabezas de ganado vacuno en la  propiedad “San Matías” de la provincia Ángel Sandoval con 46.463 hectáreas (1). Entre ellas, la más importante, es cabaña ”Sausalito” en la que se cría ganado Nelore.

Osvaldo Monasterio, militante del MNR, siempre expresó posiciones conservadoras y fascistas. Se le acusa de haber desmontado cientos de hectáreas en el área de Monteverde sin contar con trámites, ni títulos ejecutoriales.

Recientemente adquirió una buena parte del paquete accionario de la Cadena Televisiva A, de la ciudad de La Paz.

Los asuntos del grupo los administra Ernesto Monasterio, hijo de Osvaldo y personaje muy vinculado a Carlos Sánchez Berzaín, (que fue ministro de Defensa de Gonzalo de Sánchez de Lozada actualmente prófugo en EEUU y acusado de la Masacre de Octubre Negro con más de medio centenar de muertos).

Sánchez Berzaín, fue el principal ejecutor de las masacres en la Ceja de El Alto, Ovejuyo, durante las luctuosas jornadas de octubre de 2003 y fanático anticomunista, ligado al Partido Republicano de EEUU y a los diputados de la gusanería anticubana.

También tiene intereses en el comercio importador con la empresa CEIBO LTDA, importadora de alambre con los siguiente socios : CORAL Ltda, Corporación automotriz y Southern Holding Panamá.

Monasterio también adquirió la fábrica de gaseosas “Mendocina” de industrial Rafael Mendoza.

Osvaldo Monasterio Añez, fue presidente de la Federación de Ganaderos de Santa Cruz FEGASACRUZ en la gestión 1974/1975 e interventor de la misma organización en el año 1977.

Como se ve este emporio de riqueza y propiedades es el que maneja y define la Red Unitel, con una programación llena de enlatados y juegos, poco o nada de educación y cultura. En sus programas periodísticos tiene como panelistas a  opinólogos y periodistas que practican la autocensura con el nombre de libertad de prensa, distorsionando hasta la mentira la información.

Tal parece, que la reversión de una parte insignificante de sus enormes propiedades fundiarias, ha encolerizado a la familia, que se ha constituido en furiosa enemiga de las conquistas sociales y las políticas de redistribución implementadas por el gobierno de Evo Morales y utiliza de modo poco ético a su red televisiva para mentir y engañar al pueblo.

Es actualmente uno de los medios acérrimos defensores del gobierno golpista, de Jeanine Añez. Ignora las manifestaciones de protesta del pueblo, la persecución, el encarcelamiento injustificado, el asesinato en Sacaba y Senkata. Oculta las denuncias de corrupción, nepotismo y uso indebido de bienes del estado.

Ahora sabemos porque lo hace, es bueno conocer quiénes son sus dueños y comprender porque y cómo defienden sus intereses privados y su enorme riqueza.

(1) Grupo de Estudios Andrés Ibañez, “Tierra, estructura productiva y poder en Santa Cruz”, La Paz, 1986, Librería Imprenta Offset Panamericana pag.75.

Cinco cosas que no sabías sobre UNITEL

https://destiempos.wixsite.com/.- El polémico medio de comunicación ha utilizado precisamente esta características de controversia para ganar popularidad; fruto de esta estrategia es que se ganó el sobrenombre del “UniCruel”.

1. Los espacios publicitarios más caros del mercado

Es bien sabido que la Red Unitel goza de buena audiencia en nuestro medio, algo que la empresa ha decidido aprovechar al máximo ahora que los vientos soplan a su favor.

Diversos publicistas y “marketeros” consultados coinciden en que los precios que maneja el medio en su tarifario publicitario superan hasta en un 100% al costo de su inmediato competidor (Red Uno).

Sin embargo, esto no ha sido impedimento para que el actual Régimen aumentará la propaganda estatal en este medio con pases (repeticiones) innecesarias y hasta en horarios de mínima audiencia.

2. Las exclusivas de Unitel

Algo que siempre ha caracterizado al medio es la capacidad de sus periodistas para conseguir imágenes exclusivas y noticias de primicia al grito de “tenemos las imágenes”; sobre todo en temas policiales o de crónicas roja. Si bien nadie duda de las habilidades de sus periodistas, muchos de sus colegas han denunciado un favoritismo del que goza este medio al momento de acceder a información privilegiada, que para cualquier otro medio sería imposible conseguir o al menos tendría que seguir varios procedimientos legales antes de obtenerla.

A decir de muchos reporteros veteranos, todo indica que existiría un “pacto de caballeros” entre las fuerzas del orden y el medio de comunicación a fin de que este último evite difundir información negativa o datos comprometedores para miembros de la policía, a cambio de asegurarle al canal acceso irrestricto e inmediato a información privilegiada.

De esta forma se puede entender por qué la única primicia que No tiene Unitel es aquella que involucra a integrantes de la institución verde olivo.

3. Siempre cerca del poder

Tras la corta y lamentable gestión de Roxana Lizárraga como Ministra de Comunicación, el régimen Jeanine Añez tardó apenas algunas horas para encontrar al reemplazo perfecto; por supuesto tenía que ser alguien de su confianza y que compartiera su línea ideológica.

El cargo recayó sobre la comunicadora Isabel Fernández, quien hasta entonces fungía como Subjefe de prensa de la Red Unitel. De esta forma queda en evidencia con mayor claridad la influencia que el actual régimen tiene sobre el contenido informativo del medio de comunicación.

4. Al servicio de los agroempresarios

No es casualidad la cobertura ampliada que esté medio de comunicación brinda a las declaraciones y actividades que realiza la élite empresarial cruceña. La difusión y repetición incansable del discurso agroempresario, que se disfraza como información de interés común, hace pensar la agenda setting es impuesta, no desde una jefatura de prensa como en cualquier otro medios de comunicación, sino desde estratos ejecutivos.

Recordemos que el principal accionista de la casa televisiva es el Banco Ganadero, entidad financiera en la que participan poderosos agro empresarios cruceños, de entre los cuales sobresale el fallecido Osvaldo Monasterios, Senador del MNR durante el gobierno de Goni.

Por otra parte, no es casualidad el tratamiento informativo, poco profundo y banal, que el medio de comunicación le ha dado a un tema tan polémico como el de la Ley de transgénicos, recientemente aprobada por el gobierno de facto, y que será de beneficio exclusivo para sus accionistas mayoritarios.

5. Pioneros en deformación social

A título de vanguardistas, la red Unitel fue el primer medio de comunicación en poner al aire programas de contenido burdo y grotesco dirigido a una audiencia sensible y de criterio en formación como son los adolescentes.

El programa Calle 7, franquicia de origen chileno, comenzó a emitirse en agosto de 2014 acumulando desde entonces críticas cada vez más duras desde diferentes estratos de la sociedad. Finalmente, el mes pasado, ante la avalancha de cuestionamientos y críticas sobre el dudoso aporte que el programa hace a nuestra juventud, la casa televisiva optó por sacarlos del aire.

Lamentablemente este tipo de programas y contenido se han multiplicado en la televisión boliviana, no como creación y producción nacional, sino como compra y venta de franquicias “refritas” de otros países.

2 comentarios:

Unknown dijo...

En lo referente al Programa Calle 7, no lo veía casi nunca y las pocas veces que lo ví, no encontré un aporte a la cultura ni al pueblo boliviano, más al contrario, noté una carencia de valores...

Anónimo dijo...

Este sitio y su autor es el perfecto ejemplo de pq los hermanos no deben procrear hijos